
Por fin finalizó el curso, hace ya dos semanas que los niños terminaron el colegio, y después de todo lo ocurrido, los más pequeños de la casa van a poder disfrutar de un merecido descanso.
Cuando llegan las vacaciones de verano, normalmente, es un descontrol para los niños y niñas por la falta de rutinas, horarios, salidas… y todo esto puede conllevar a que cambie el comportamiento de los pequeños.
Comienzan a aburrirse, a necesitar más atención de los adultos, aparecen más rabietas de las habituales… todo esto provoca que su conducta o comportamiento haya ocasiones que no nos guste.
Asi que en verano, da igual que sean vacaciones, tendremos que aprender a gestionar bien con nosotros mismos como resolveremos esos pequeños conflictos que pueden aparecer.
Lo primero que les debemos transmitir es que las vacaciones son para disfrutarlas, para desconectar, es una época de relax, descanso, desconexión. Pero para poder transmitirles eso, nos tienen que ver a nosotros disfrutar de este periodo estival.
Es cierto, que en este periodo, se les concede más caprichos de los habituales, y si se les dice en algún momento que no, es cuando aparecen las temidas rabietas y se les da en muchas ocasiones “por no escuchar”. Por eso, tenemos que seguir enseñándoles, el valor de las cosas, seguir alguna rutina… y aunque sean vacaciones uno no puede tener todo lo que quiera y cuando quiera.
Es una buena época para que adquieran ciertos hábitos que durante el curso, por tiempo, no podemos transmitirles. Por ejemplo: que aprendan hacerse la cama, que ayuden a poner la mesa, a recogerla, dedicar tiempo a que aprendan a recoger sus juguetes, a ordenar la habitación… siempre todo en función de la edad.
Es muy recomendable que todos los días dediquen 20 minutos o un poco más a no perder hábitos académicos: lectura, matemáticas, caligrafía, idiomas. Hay miles de maneras de poder trabajar todo eso sin tener que obligar ni forzar a un niño o niña. Pueden elegir ellos el libro que quieren leer en verano; escribir un diario de todo lo que están haciendo; sopas de letras, sudokus, libros de editoriales que ya vienen preparados para trabajar lo aprendido durante el curso y son bastante lúdicos, juegos online para poder repasar los idiomas que estén aprendiendo…
Que pautas nos pueden ayudar al buen funcionamiento familiar durante este periodo estival:
- Seguir trabajando las mismas normas que fomentamos durante todo el año. Aunque estemos de vacaciones, no tenemos que ser permisivos todo el tiempo, debemos saber gestionar de manera equilibrada.
- En la medida de lo posible, mantener algunas rutinas.
- Evitar que abusen de los juegos electrónicos. Tienen mucho tiempo libre, pueden jugar a diario, pero también tienen que dedicar tiempo a otros juegos, a relacionarse con sus iguales…
- Es un buen periodo para realizar actividades al aire libre.
- Y la más importante, es el periodo en el que más tiempo podemos dedicar a la relación paterno-filial ya que durante el curso no podemos dedicarles todo el tiempo que desearíamos. Ahora es un buen momento para dedicarles tiempo de CALIDAD. Así que aprovechar para jugar con ellos, realizar actividades en familia, para hacer reuniones y poder hablar tranquilamente, etc.
¡FELIZ VERANO!
Familyon